La salud y el bienestar emocional de los empleados son factores que impactan directamente en la salud financiera de las empresas - Formación para Empresarios, Managers y Directivos
+34 966 26 30 27 executive@doeua.es
La salud y el bienestar emocional de los empleados son factores que impactan directamente en la salud financiera de las empresas

En el marco del compromiso imprescindible entre empresa y empleados, la salud y el bienestar emocional de la plantilla son elementos que impactan directamente en la salud financiera y en el compromiso social de las compañías.

Esta es una de las conclusiones importantes de la jornada “La Salud y el Bienestar Emocional como elemento captador y retenedor del Talento”, organizada por el Club de las Buenas Decisiones con la colaboración imprescindible de ASPY Prevención, el pasado 24 de abril de 2024.

Decía el profesor José Luis Gascó en la presentación de la jornada: “Hoy hablamos de un tema tan importante como poco atendido en las empresas: la salud  de las organizaciones no en términos estrictamente financieros, sino en términos de salud física y mental, lo que sin duda tiene una repercusión importante en la salud financiera de las empresas, aunque, como decía, no siempre resulta evidente para las organizaciones, más allá del cumplimiento estricto de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales”.

En términos empresariales, la promoción de la salud en el lugar de trabajo contribuye a que los trabajadores se sientan mejor, lo que se traduce en:

  • Descenso del absentismo
  • Mayor motivación
  • Mejora de la productividad
  • Mayor facilidad para captación y retención del talento
  • Mejor clima laboral
  • Imagen positiva de una empresa comprometida con la salud de los trabajadores.

Todo esto impacta directamente en la salud financiera de la compañía.

Afortunadamente, sobre el ejemplo de algunas empresas líderes e innovadoras, va tomando cuerpo el concepto de empresa saludable que impulsa iniciativas destinadas a mejorar la salud y los hábitos de vida de sus trabajadores, incluso dentro del centro de trabajo cuando es posible,más allá de las exigencias legales, con la premisa de que un empleado sano es más productivo.

Tener la oportunidad de reflexionar en torno a estos temas con la doctora Laura López-Táppero, directora médica de Prevención en Aspy y con Javier Navarro, director territorial de Aspy Prevención, así como sobre las herramientas que los departamentos de Recursos Humanos tienen a su alcance para el cuidado de la salud mental y física de los equipos, se convierte hoy en un elemento diferencial en la gestión de personas a todos los niveles en las organizaciones.

El Club de las Buenas Decisiones, atento a los elementos de gestión capaces de aportar ventajas competitivas a las organizaciones, pone a disposición de todos sus alumnos, egresados, empresas y futuros directivos, estos conocimientos con la doctora López-Táppero, de ASPY, que ayudarán a definir el futuro de las empresas líderes.

La doctora López-Táppero inició su intervención haciendo referencia a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible a los que deberíamos llegar en 2030, pero “nos va fatal”, de lo que todos somos un poco responsables.

Para progresar adecuadamente deberíamos centrarnos en aquellos que impactan más en nuestro trabajo y que podemos gestionar. En nuestro caso, desde las áreas de Recursos Humanos, el Objetivo 3.- Salud y Bienestar, y el Objetivo 8.- Trabajo decente y crecimiento económico.

Y sin duda estamos haciendo cosas, pero no siempre tan útiles como deberían. Algunos ejemplos son muy gráficos; en el Objetivo 3, en España se detecta una media de 6 nuevos casos de VIH al año por cada 100.000 habitantes, o 9,24 casos de tuberculosis (una enfermedad prácticamente desaparecida que parece rebrotar); o el hecho de que en nuestro país, un 25% de la población fuma todos los días, aún sabiendo que el tabaco mata.

Desde luego, son problemas sociales que requieren tratamiento médico, pero son también problemas laborales que impactan directamente en los resultados de las compañías. Pero es que, pese a la legislación sobre prevención de riesgos laborales, como decíamos, seguimos pensando más en la enfermedad que en la salud, cuando el camino correcto y más eficiente es promover la salud y solo cuando falla, entonces atacar la enfermedad.

Dos elementos, decía la ponente, muy relacionados con el Objetivo 3, pero también con el Objetivo 8, son la rotación de los empleados y el absentismo, ambos en vía de crecimiento, con un efecto terrible sobre los resultados de las empresas, sobre lo que no siempre somos plenamente conscientes, y cuya reducción progresiva puede explicar en gran medida la función imprescindible de las áreas de Recursos Humanos que trabajan bien.

¿Por qué se produce esa rotación?. Básicamente por tres razones que, ordenadas, son: por un tema generacional (los más jóvenes tienen menos miedo al cambio de empresa, incluso en muchos momentos lo ven como un aliciente profesional); por un ambiente tóxico en la compañía, lo que les anima a cambiar, con periodos de absentismo más o menos expreso e impacto en su salud, incluso en la del grupo; para mejorar sus condiciones laborales, económicas, conciliación, etc.

La realidad es que el 15% de los trabajadores tuvo algún problema de salud el año pasado (con la salud mental como la segunda patología por tiempo de baja), y el 46% de ellos citaban al trabajo como detonante o agravante del problema.

Anticipar en la medida de lo posible esos problemas justifica, como decíamos, una parte importante de la función directiva en las empresas y, por supuesto, al departamento de Recursos Humanos, que debe actuar siempre entendiendo que la prevención implica atender los aspectos laborales y personales de los trabajadores, que no son conjuntos disjuntos, que están necesariamente relacionados, y que ambos afectan a la productividad del trabajador. Y en este punto, la prevención es el factor determinante.

En España, decía la doctora López-Táppero, vivimos mucho, pero no vivimos bien a partir de los 60 años porque no invertimos en prevención. Tenemos casi un millón de personas en lista de espera quirúrgica, lo que significa que un gran número de ellas está de baja, con la carga que supone tanto para las empresas como para el Estado. Más inversiones en prevención, en eliminación de listas de espera, en anticipación de problemas, es fundamental para mejora de la salud física y mental de las personas y, también, de la salud financiera de las empresas y de la Seguridad Social.

Prestar mayor atención en las empresas a las habilidades blandas (soft skills), como Trabajo en equipo, Liderazgo, Comunicación asertiva, Adaptabilidad, etc., evita equipos tóxicos, causa de muchos de los problemas enunciados.

Esta visión de las relaciones laborales en la empresa no es, en absoluto, una extravagancia procedente de otras culturas, sino prácticas de nuestras empresas líderes, que han entendido bien la coherencia entre salud y productividad a través, como decíamos, del compromiso de la empresa con los trabajadores y la ocupación permanente en su salud física y mental.

VISITA LA GRABACIÓN DEL EVENTO

Todavía no hay ningun comentario. ¡Puedes ser el primero en dejarnos un comentario!

Enviar tu comentario:

Tu email no será publicado.