En el segundo Meetup Controller Alicante, Juan Hernández García, Business Controller en Estrella Galicia y Director de Estrategia del Global Chartered Controller Institute, compartió sus perspectivas sobre la evolución del rol del controller en un mundo en constante cambio. Durante su participación, Juan Hernández destacó la importancia de las habilidades personales y la necesidad de adaptarse a un nuevo paradigma.
El cambio de paradigma: De la planificación a la reacción
Vivimos en una era caracterizada por la velocidad, agilidad, fragilidad y falta de previsibilidad. Este cambio en el entorno empresarial exige que los controllers abandonen el enfoque tradicional de planificación a medio y largo plazo para abrazar una nueva realidad: la necesidad de reacción rápida y efectiva. «Hace unos años hablábamos de planificación y estrategia; ahora tenemos que hablar de reacción».
Habilidades personales: La clave del éxito
Los controllers deben ser capaces de reaccionar y guiar a diferentes departamentos hacia decisiones consensuadas basadas en información precisa. La gestión y planificación tradicionales deben evolucionar hacia un enfoque más dinámico y proactivo.
Desafíos en las industrias: Producción y venta
El cambio de paradigma afecta a las industrias de diversas maneras. Las empresas intensivas en producción se enfrentan al desafío de redefinir sus cadenas de suministro. La eficiencia ya no es suficiente; la resiliencia se convierte en un factor crucial. Por otro lado, las empresas centradas en la venta experimentan cambios en las perspectivas de consumo, la incorporación de nuevos consumidores y la influencia de la fuerza laboral.
Redefiniendo métricas y procesos
Existe una clara necesidad de redefinir métricas en todas las industrias, buscando no solo la eficiencia sino también la resistencia ante cambios imprevistos. Además, la redefinición de procesos se presenta como un desafío esencial para adaptarse a un entorno empresarial en constante transformación.
El impacto de la fuerza laboral
Las nuevas generaciones de colaboradores tienen mentalidades distintas, lo que requiere estrategias innovadoras para atraer, retener y potenciar el talento.
En resumen, el papel del Controller evoluciona hacia un enfoque más reactivo y centrado en habilidades personales. La resiliencia se convierte en la clave para enfrentar los desafíos de un mundo empresarial cada vez más impredecible. La redefinición de procesos, métricas y la gestión efectiva de la fuerza laboral se presentan como pilares fundamentales para el éxito en este nuevo paradigma.
La participación de Juan Hernández García proporcionó una visión valiosa y provocadora, instando a los profesionales del control de gestión a abrazar el cambio y a desarrollar las habilidades necesarias para prosperar en un entorno empresarial dinámico.
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